La mayoría de los bebés presentan bilirrubina durante la primera semana de vida. La experiencia penosa del nacimiento puede enviar muchos glóbulos rojos a quedar fuera de circulación de manera temprana (especialmente si se usa una ventosa) y los hígados de los bebés a menudo no están preparados para esa carga. Antes de ingerir la leche materna y de que comiencen las deposiciones en serio, la bilirrubina se acumula más fácilmente. La ictericia es incluso más común en bebés prematuros.
Las causas de ictericia en niños pueden ser:
- Ictericia del recién nacido (ictericia fisiológica)
- Ictericia por lactancia materna
- Ictericia por la leche materna
- Hepatitis viral (hepatitis A, hepatitis B, hepatitis C, hepatitis D y hepatitis E)
- Anemia hemolítica
- Trastornos congénitos que causan problemas para el procesamiento de la bilirrubina (síndrome de Gilbert, síndrome de Dubin-Johnson, síndrome de Rotor o síndromes de Crigler Najjar)
- Atresia biliar
- Hepatitis autoinmune
- Malaria
La ictericia por la leche materna es mucho menos común y se presenta en aproximadamente 1 por cada 200 bebés. En este caso, la ictericia generalmente no es visible hasta que el bebé tenga una semana de nacido y a menudo alcanza su punto máximo durante la segunda o tercera semana. Este tipo de ictericia puede ser causada por sustancias en la leche de la madre que disminuyen la capacidad del hígado del bebé para manejar la bilirrubina. La ictericia por la leche materna rara vez causa problemas, ya sea que reciba o no tratamiento y generalmente no es una razón para dejar de amamantar al bebé.
Fuente: medlineplus
No hay comentarios:
Publicar un comentario